miércoles, 25 de mayo de 2011

Una tarde justa en una noche cualquiera

Voy aprendiendo tarde, ya ves,
problemas desde el sueño.
Las falsedades que siempre creí
son mas fuertes que su fragancia.

De golpe yo era el mejor
(y aunque me preguntó),
"jamás me fijo en números"- dije
y, menos desatando esas flores.

No hacía frío en el pasillo
y, por deducción, era el clima
de las cosas cuando no se aguantan.
(Las manos en el cuello ya cansaron)

Hay fuertes palabras
en el paso del tiempo, cuando ya ha pasado.
En la memoria manchas grises,
que se van blanqueando, al fin!

(Las falsedades que sé, son de los que nunca sueñan...)

8 comentarios:

Anónimo dijo...

me encanta, sinceramente me encanta todo lo que escribís.

Noelia Palma dijo...

querido!! no es una mañana cualquiera después de leerte!

un besote

Mariposa dijo...

Esto me encanto! "en la memoria manchas grises, que se van blanqueando, al fin!" Voy a pasar mas seguido. Yo estoy tratando de blanquear esas manchas grises... Beso!

TORO SALVAJE dijo...

Casi todo son falsedades.
Hasta lo que no nos imaginamos.
Un decorado enorme es el mundo.

Saludos.

HUMO dijo...

Copadísimo!!!!
Ya ves me gusta tu forma.

=) HUMO

Espérame en Siberia dijo...

Qué feito debe ser eso de nunca soñar, ¿no?

Muchos besos, adorado mío :D

Haze dijo...

Me encanta desde el título, muy lindo!
Saludos!

Anónimo dijo...

Y ¿por qué no sueñan? Hay que soñar! :) muá