miércoles, 8 de septiembre de 2010

Paranoia


Salís, sin saber bien que fue lo que te impulsó a salir tan rápidamente de tu casa, de tu segura casa. Quizás fue el sonido extraño que vino del techo, o quizás no fue nada más que la sensación de que alguien te observa, como si estuvieras en alguna prueba o experimento pero, por pensar en tu salida no te das cuenta que alguien viene detrás.
Tranquilo, viejo, es un caminante, quizás como vos, mas oscuro y sombrío pero es como vos, otro caminante que no tiene seguramente algún destino, igual que vos.
No préstes atención, no es nadie que te busca y, no hay porque alarmarse, ni siquiera por cruzar la vereda en el mismo momento que vos, o dar vuelta en la misma esquina, caminar esas dos cuadras sintiendo el sonido de sus tan oscuros y sombríos zapatos, iguales a tus temores, tontos temores.
Distraer la mente, es buena opción, suena casi a la necesidad mas profunda que pide tu cuerpo, distraete, con tus hermosos recuerdos de las bellas épocas donde eras un hombre, naciente hombre dejando la adolescencia, y esos fantasmágoricos no eran mas que un pensamiento jamás pensado por tu cabeza.
Vuelvo al presente. El rastro de las personas que pisotearon tu alma no existe en este tiempo, pero ¿Hasta cuándo?, si nadie sabe cuánto tiempo más vas a estar sin caer en otra trampa, angustiosa trampa como la del hombre que te sigue, y te busca llevar a algun sitio donde puedas excusarte de culpas a las cuales solo sentis impotencia por tu inocencia perdida.
Pero, volviendo a la calle y dejando de lado los tristes y gélidos recuerdos que finalmente no eran tan felices, mirá, viejo, el hombre perdio tu rastro, o vos lo perdiste como perdiste tu cabeza en los laberintos de tu conciencia, y ahora celebrás de nuevo, el nuevo día, pero ¿Hasta cúándo?



La verdad esto fue escrito sin pensar, sólo con ganas de escribir. Sepan disculpar.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

No tienes que disculparte.
A mí me gustan tus palabras y mucho ;)
Es una pregunta que me hago muy a menudo últimamente: "Hasta cuándo?". A veces creo que no voy a dejar de hacermela nunca.
En lo personal, hoy por hoy y como están las cosas; si encuentro a un extraño que quiere llevarme: lo SIGO.
Un beso o 2 !

Anónimo dijo...

Y gracias: por hacerme compañía en esta noche que, una vez como tantas como siempre: el insomnio hace de las suyas ... (perdí la cuenta cuando fue la última vez que pude dormir bien y como Dios manda)
Tus palabras hacen más grato el momento ;)
Un beso o 2 !

Apple dijo...

juzgamos en los demas lo que no toleramos de nosotros mismos...

o en el cason de la sombra es nuestro pasado quien siempre nos sigue...
no nos deja caminar en el presente pues sismpre trae recordatorios...



oye buen escrito...
y buen dibujo!...

saludos!

Unknown dijo...

...hasta cuando la sombra de nuestro pasado atormentará nuestro andar?....es una buena pregunta si encuentras la respuesta solo anótala y déjala volar que si todo sale bien ese extraño caminante me la traerá...

un beso grande...espero me visites

La rubia dijo...

La sombra de lo vivido nos sigue siempre. Porque gracias a lo que nos ha tocado, lo que hemos elegido y lo que no hemos hecho nos hace quien somos, acá y ahora.
No vale disculparse cuando te salen cosas geniales!
Un beso :)

TORO SALVAJE dijo...

Nada de disculpas.
Es un placer leerte.

Saludos.